Los alimentos funcionales pueden ser naturales o procesados y nos ayudan a encontrar el equilibrio previniendo enfermedades y déficit nutricionales.
El ritmo de vida diario nos lleva a dedicarle cada vez menos tiempo a la selección y preparación de alimentos convirtiéndose en un obstáculo para lograr una alimentación variada y equilibrada. Sabemos que una alimentación adecuada juega un papel fundamental en la prevención de enfermedades, mejorando así nuestra calidad de vida. Por eso a la hora de elegir podemos optar por aquellos alimentos y productos naturales que además de nutrirnos, favorecen nuestra salud.
Ácidos grasos esenciales: Los ácidos grasos Omega 3 y 6 disminuyen el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares y son fundamentales para el normal desarrollo del sistema nervioso. Además, los Omega 3 tienen propiedades antiinflamatorias. Finalmente, los Omega 9 disminuyen los niveles de colesterol total y de triglicéridos en sangre. Se encuentran en:
Omega 3: en pescados de aguas profundas (salmón, caballa, atún, etc.), semillas de lino, aceite de pescado, de canola y de soja.
Omega 6: aceites vegetales, germen de trigo, frutas secas y porotos de soja.
Omega 9: aceite de oliva, palta, aceitunas y maní.
Vitaminas y Minerales: Nuestro cuerpo necesita de todas las vitaminas y minerales para su correcto funcionamiento. Estos nutrientes protegen nuestro cuerpo frente a distintas enfermedades y promueven la salud. En una dieta equilibrada se necesita principalmente: vitaminas A y C, del complejo B, ácido fólico, zinc, calcio, hierro y selenio. Se encuentran en:
Leches, quesos, huevos, levadura de cerveza, germen de trigo, cereales, frutas y algas.
Fitoesteroles: Son compuestos de origen vegetal, como por ejemplo las isoflavonas, cuyo efecto destacable es que, al ser consumidos con alimentos que contienen colesterol, desminuyen la absorción de este último, protegiendo el sistema cardiovascular.
Fotoquímicos: Estas sustancias de origen vegetal le confieren color y sabor a los alimentos. Su capacidad antioxidante protege a las células del cuerpo del envejecimiento y de sus enfermedades asociadas, como por ejemplo: cataratas y ciertos tipos de cáncer. Estos son Polifenoles, Carotenoides y Flavonoides. Se encuentran en:
Polifenoles: en el café, té verde y vino tinto.
Carotenoides: en el licopeno del tomate y en el betacaroteno de la zanahoria.
Flavonoides: los encontramos en los alimentos cítricos (bioflavonoides), en la remolacha (antocianinas), la cebolla (quercetina), el ajo (alicina), las coles y el chocolate amargo.
Fibra Dietética: La fibra dietética forma parte de las paredes celulares de las plantas. Como nuestro cuerpo no puede digerirla, ésta llega casi intacta al intestino brindando numerosos beneficios a nuestro organismo. Una manera de clasificar la fibra es en soluble e insoluble. La fibra soluble ayuda a reducir el colesterol. La insoluble es utilizada por las bacterias del intestino favoreciendo el tránsito intestinal y previniendo así el estreñimiento y la formación de divertículos. Se encuentran en:
En la pulpa y cáscara de frutas, verduras, legumbres, granos, enteros o integrales.
Prebióticos: Estas sustancias vegetales no digeribles, al llegar al intestino, sirven de alimento para las bacterias beneficiosas del colon. Favorecen la regularidad intestinal, mejoran la absorción del calcio y aumentan las defensas del organismo. La inulina y los oligofructosacáridos son ejemplos de prebióticos. Se encuentran en:
Puerros, cebolla, achicoria, espárrago, ajo y alcaucil.
Probióticos: Son microorganismos vivos (en su mayoría bacterias como Lactobacilos y Bifidobacterias) que, al ser ingeridos en cantidades suficientes, ejercen efectos positivos para la salud. En el intestino favorecen la absorción del calcio y del fósforo de los lácteos y también aumentan la producción de vitamina B6, que fortalece el sistema inmune. Se encuentran en:
Productos fortificados como yogures, leches fermentadas y cereales.
De no poder incorporar estos alimentos funcionales de manera natural, es conveniente tomar suplementos nutricionales, ya que es fundamental para la prevención de enfermedades, teniendo en cuenta que sean elaborados por un laboratorio serio.